Tengo Miopía
En general la miopía suele ser una condición que afecta gran parte de los aspectos de la vida del paciente, ya que incluso en grados leves suele conducir a disminución importante de la agudeza visual; y adicionalmente la miopía es una condición que se puede asociar no sólo a mala visión, sino a una gran variedad de síntomas relacionados a la actividad visual entre los que se encuentran cansancio ocular, visión doble, fluctuaciones en la visión, cefaleas o dolores de cabeza y dependiendo de la magnitud y de las complicaciones asociadas de dificultades laborales, del aprendizaje y del desarrollo deportivo, llegando incluso en algunos casos a condición de discapacidad.
El aspecto más importante a entender en un paciente miope y en los padres y cuidadores de los niños con miopía, es que esta condición NO es únicamente un problema de gafas, es una condición que se puede asociar a un enorme grupo de complicaciones entre las que se encuentran ambliopía, agujeros y desgarros de la retina, maculopatía, retinopatía, glaucoma y catarata entre otras enfermedades que pueden conducir a una perdida permanente de la visión; es importante que el paciente miope asista a evaluación o consulta en una clínica o con un oftalmólogo con experiencia en el manejo de ésta condición con el fin de obtener un manejo integral, donde se identifiquen oportunamente las potenciales complicaciones asociadas al defecto refractivo y se brinde la mejor opción de tratamiento posible, ya sea este el uso de gafas, de lentes de contacto (blandos, desechables, gas permeables o semiduros o semiblandos), cirugía refractiva mediante láser o implante de lentes intraoculares.